
La creatividad que vive en ti
Tendrás que tener paciencia, ya que no me cansaré de decir que TODOS SOMOS CREATIVOS, esto seguramente lo oirás de mí muchas veces porque la verdad es que quiero que te lo creas.
Muchas veces he oído a las personas decir “yo no soy creativo, no sé pintar” o “en mi trabajo no puedo ser creativo”… “Trabajo con números o con leyes”, pero lo que no nos damos cuenta es que al decir esto estamos atacando y quitándole toda la fuerza a una parte innata de nuestro ser.
Piensa un momento en los niños… ¿Conoces a algún niño que no haya jugado en un mundo fantástico?¿Uno que no juegue a ser doctor, profesor, cocinero o mamá/papá? Creo que va a ser difícil que respondas sí a esta pregunta.
Yo por lo menos a todos los que conozco los he visto imaginando historias maravillosas y emocionantes; y por lo tanto dando rienda suelta a su creatividad. Y en no solo se trata de la imaginación sino de que los niños dejan (de forma inconsciente) que todos componentes de su creatividad fluyan libremente y sin juzgar en todo lo que hacen.
Componentes de la creatividad
Si haces una investigación vas a encontrar que hay muchas teorías en cuanto a cuales son los componentes de la creatividad. Leerás sobre el conocimiento y habilidades, el pensamiento creativo y la motivación.
Sin embargo, hoy quiero ahondar en lo que en lo personal considero demuestran que la creatividad es algo natural de todo ser humano y son:
* La imaginación
* La curiosidad
* La habilidad de aprender
En el colegio nos pedían que prestáramos atención todo el tiempo. En muchos casos, si nos veían soñar despiertos era cuestión de minutos para el que el profesor(a) nos llamara la atención y nos hiciera aterrizar de nuevo en la realidad.
Empezamos nuestra vida siendo curiosos y usando constantemente nuestra imaginación, como una forma de aprendizaje y la forma de ir entendiendo el mundo a nuestro alrededor y nuestra herramienta más fiel al momento de jugar. Sin embargo, a lo largo del tiempo se fueron volviendo más difíciles las situaciones que necesitábamos comprender y esto muchas veces resultó en que dejaremos de usar nuestra curiosidad e imaginación.
Esto lo resume de forma muy clara, Flavia Mannocci, autora del libro “La curiosidad” cuando dice: “La curiosidad nos empuja hacia la exploración, que permite comprender situaciones nuevas, cuya dificultad aumenta progresivamente.” Confirmando de igual forma que tenemos una habilidad de aprender y adquirir conocimientos que es infinita pero, que al igual que los otros dos componentes, puede verse afectada o reducida cuando vamos creciendo.
Lo triste, es que en la mayoría de los adultos uno de estos tres componentes, o todos, se han visto afectados ya sea por los fracasos vividos, por palabras de personas que nos dijeron cosas como: “deja de vivir en la nube,” “no eres suficientemente bueno para …” o cosas tan simples como: “los artistas son pobres.” Y esto ha dejado a muchos de nosotros cojeando en la creatividad o simplemente la ha dormido.
Cómo perdí la creatividad
Cuando pienso en cuando era pequeña me acuerdo siendo muy creativa, sobretodo al momento de jugar.
Una vez, por ejemplo, quería tener una mega mansión para mis Polly Pocket (unas diminutas muñecas de mi época) y ya que mis papás no me iban a estar comprando todo lo que se me antojara, hice unos muebles en arcilla pequeñitos y arme la mansión soñada en una caja enorme.
Esta creatividad siguió por mucho tiempo, ya que en bachillerato me la pasaba en las clases haciendo tarjetas para algún novio o para los novios de mis amigas, cortando papeles, dibujando cosas en mi agenda y escribiendo cartas a mis amigas. A lo que mis profesores me reprochaban constantemente como falta de atención.
Estos reproches, el que me vieran como vaga por no prestar atención a las clases (a pesar de que me iba bastante bien con mis notas), e inclusive la comparación que yo misma hacía con otras personas que en mi parecer eran más talentosas en lo que me gustaba hacer, fueron los detonantes silenciosos con los que empezó a morir mi creatividad. Todo esto frente a mis narices y sin mí más mínimo esfuerzo o entendimiento que podía frenar esta decaída creativa.
La recuperación creativa

Las excelentes noticias es que todos tenemos la capacidad de revivir nuestra creatividad y te preguntarás para que quieres hacer eso si ya te va suficientemente bien siendo como eres.
Pues mi respuesta a eso es una pregunta. ¿Quieres ser mejor persona y hacer las cosas mejor? Pues entonces trabaja en revivir tu creatividad.
Para lograr la recuperación necesitas compromiso y dedicación (como en todo en la vida donde quieras resultados, ¿no?).
Algunos años atrás me encontré con un libro que me cambió la vida y sé que si lo lees y practicas, cambiará la tuya. “The artist way*” por Julia Cameron te lleva por lo que la autora llama una recuperación creativa, que en mi parecer es reconectarte con esa parte innata que tenía tu niño(a) y dejaste perder.
El primer paso por tu creatividad
Esta recuperación creativa te va a ayudar a encontrar soluciones a problemas cotidianos de forma diferente, a usar tu imaginación, y a practicar la creatividad en tu día a día.
Empieza con el compromiso contigo mismo de emprender el camino hacía una vida más creativa y practicar estos ejercicios para empezar a despertar esa imaginación, curiosidad y habilidad de aprender que tenías de niño. En tu trabajo te ayudará y ayudarás a otros para la innovación, que hoy en día es tan necesaria.
Entonces, el primer ejercicio que te aconsejo practiques primero:
- Haz una lista en un cuaderno, que de ahora en adelante dedicarás para trabajar tu creatividad, de que te gustaba jugar de niño(a).
- Cierra los ojos y recuerda como te sentías cuando jugabas lo que más te gustaba.
- Haz una lista de 3 veces en las que fuiste creativo en tu vida. Acuérdate que la creatividad no se trata de pintar, hacer muebles en arcilla, cantar o bailar, si no piensa y anota 3 ocasiones en las que solucionaste un problema o afrontaste una situación de forma no convencional, innovadora o diferente.
Piensa que patrones encuentras, qué cosas te hubiera gustado seguir haciendo y cómo te sientes con haber recordado esto. Revisa tus listas de vez en cuando, durante tu proceso de recuperación creativa, y trata de descubrir mensaje que tu niño(a) quiera enviarte.
*NOTA: No es solo para artistas, es para todos. Así que sí puedes LÉELO.
https://tienda.sophosenlinea.com/libro/la-curiosidad_247997
Photo by William Iven on Unsplash
Photo by Sharon McCutcheon on Unsplash
Sorry, the comment form is closed at this time.